tu espacio de descanso

Cuna

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Cesta

CÓMO ORDENAR LA HABITACIÓN de TU HIJO

Así es la habitación ideal para que tu bebé descanse

Aprende todo lo que tienes que saber para tener a punto el dormitorio de tu bebé, desde la decoración hasta la cuna pero siempre con la vista puesta en la seguridad y su descanso

CUNA

Descanso seguro

Si optas por una cuna, la seguridad es la máxima para minimizar el riesgo de golpes y accidentes. La opción más recomendable es una que tenga las puntas redondeadas y esté hecha a base de listones para favorecer la ventilación. Además, busca siempre cunas que estén terminadas con pinturas y materiales libres de agentes químicos o tóxicos que sean perjudiciales para el niño. Son muy útiles las cunas que permiten montarla en dos alturas para ir adaptándose al crecimiento del bebé. Otro dato importante: el colchón tiene que ser firme y estar hecho de materiales naturales, como el lyocell, y es mejor no poner mantas o almohadas que puedan ser un riesgo para el bebé. Un consejo: intenta colocar la cuna lejos de la ventana.

CAMBIADOR

Todo a mano

Es un mueble muy útil para separar las actividades que deben hacerse en la habitación y un gran aliado para mantener el orden gracias a sus cajones. La ubicación ideal es cerca de las ventanas y lo más importante a la hora de elegir un cambiador es que tenga las puntas redondeadas para evitar lesiones.

ILUMINACIÓN

La versatilidad de las luces inteligentes

Las luces en la habitación deben estar muy estudiadas y regularse según las necesidades del bebé y las actividades que se realizan en la habitación. Por eso, son muy útiles las que se pueden controlar de manera gradual, como el sistema de iluminación inteligente TRÅDFRI de IKEA, que permite no tener que encender la luz general si tienes que ir de noche a su dormitorio controlando la luz con un mando y regulando su intensidad y tonalidad.

CORTINAS

Cómo regular la luz y el sonido

Las cortinas y estores de la habitación tienen una doble función. Por un lado, regular la entrada de luz natural y, por otro, servir de aislante acústico. Cuanto más gruesa sea la cortina, mayor capacidad tendrá de amortiguar los ruidos del exterior. Lo más recomendable es optar por materiales opacos. Y otra cosa importante: la cuna no debe estar cerca de las cortinas para evitar que el bebé pueda agarrarse a ellas. Si no tienes otra opción, decántate por los estores siempre sin cordones.

SILLÓN

Comodidad para ti también

Un sillón, tanto para dar de comer cuando sea necesario como para darle un toque mucho más acogedor a su dormitorio, es un complemento perfecto para el dormitorio de un bebé.

CESTA

Tus aliados del orden voy a ver el texto

El orden es fundamental en la habitación de un bebé, y la mejor forma de conseguirlo es pensando en qué actividades vamos a desarrollar allí: desde guardar su ropa, cambiarle o darle de comer. Por eso, es fundamental usar armarios, estanterías, cestas y otros sistemas de almacenaje para tener a mano siempre lo que necesitamos (la clave es guardarlo siempre en el mismo lugar) y que no haya nada al alcance de su mano.

BEBÉS

¿Padre primerizo? Ten en cuenta estas claves para la habitación de tu bebé

Seguridad, orden, una temperatura y una iluminación adecuada son las reglas para que la habitación de tu bebé sea un remanso de paz y descanso

Elena Pérez

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Todos queremos tener un espacio perfecto para cuando llegue el bebé. Lo preparamos con mucha ilusión, lo decoramos con mimo y lo amueblamos al milímetro en un precioso ritual. Una parte de esa ilusión debe dedicarse a planificar un sitio agradable y seguro para el pequeño. En el caso de las cunas, hay que tener en cuenta las claves que la hacen segura. Además, saber qué tipo de complementos son necesarios o sobran en la habitación de un recién nacido es fundamental para tu bebé descanse, y vosotros también.

Un bebé necesita dormir en un lugar seguro y tranquilo. El sueño es tan importante para un bebé como el alimento. Durmiendo, el cerebro del bebé crece y se desarrolla. Según un estudio de la National Sleep Fundation, los recién nacidos (hasta tres meses) deben dormir entre 14 y 17 horas al día; los lactantes (de cuatro a 11 meses), entre 12 y 15 horas y los niños pequeños (de uno a dos años), entre 11 y 14 horas, ya que diversos estudios científicos han demostrado la asociación entre sueño de corta duración, obesidad, hiperactividad, impulsividad y desarrollo cognitivo bajo. Por eso, hay que tomarse muy en serio el diseño de la habitación de nuestro bebé para que no entorpezca su desarrollo y descanso y le ofrezca toda la seguridad.

El sueño es fundamental en el ser humano, pero más en los bebés, puesto que es muy importante para el desarrollo cerebral. No dormir tiene consecuencias a corto plazo, como la irritabilidad; y a largo plazo, problemas de aprendizaje, peores habilidades sociales y un menor desarrollo emocional”, corrobora el doctor Víctor Soto, coordinador del grupo de pediatría de la Sociedad Española del Sueño. Para que estés tranquilo y tengas claro lo imprescindible, apunta estas seis claves.

Una cuna segura

La primera característica de una cuna debe ser la seguridad. “Para IKEA la seguridad es esencial. En este sentido, todas nuestras cunas y resto de muebles para bebés están específicamente desarrollados y diseñados para minimizar el riesgo de accidentes, por eso todos tienen puntas redondeadas para evitar lesiones en caso de golpearse con ellos. Entendemos también que, a medida que los bebés van creciendo, tienden a coger y probar todo lo que está a su alcance y, por esta razón, todos nuestros productos para bebés están terminados con pinturas y materiales libres de agentes químicos o tóxicos que sean perjudiciales para el niño”, señala Raquel González, responsable de confort y descanso de IKEA Ibérica. También es fundamental que la base de las cunas sea de listones, para que el aire fluya y se ventile constantemente el colchón, manteniendo el confort térmico y previniendo la humedad y el exceso de sudoración.

BRUNO Y JULIA EN...

Buscando la mejor combinación para que descanse tu bebé

Bruno y Julia aprenden semana a semana todo lo necesario para crear la habitación perfecta para descansar

No caigas en la tentación de cargar de elementos la cuna de tu bebé. Una de las reglas de oro para su seguridad es menos es más. “En los bebés hay que reducir el riesgo de muerte súbita, por eso, desde la Asociación de Pediatría, se recomiendan colchones no excesivamente blandos, ni mucha ropa de cama, ni edredones, etc. Tampoco están recomendados los objetos sueltos y las chichoneras, sobre todo hasta el primer año de edad. En general, la ropa de cama debe ser de materiales transpirables que no hagan aumentar la temperatura. Respecto a los doseles de las cunas, mientras que no la toque y no aumente su temperatura, no debería haber problemas”, explica el doctor Soto.

A la hora de elegir el colchón, este debe encajar perfectamente ya que si es demasiado grande o pequeño, quedarán huecos en los que el bebé puede quedar atrapado. Y para ir acompañando al bebé durante su crecimiento, una solución perfecta son las cunas que se pueden montar a dos alturas diferentes. “De este modo se facilita a los padres la interacción con el bebé y se garantiza su seguridad cuando va creciendo. La base en la posición más alta se utiliza cuando es recién nacido y la baja cuando ya empieza a sentarse o incorporarse y hay riesgo de que se salga de la cuna. También, en la mayoría de nuestros modelos, uno de los lados se puede retirar cuando tu hijo comience a entrar y salir solo de la misma, para comenzar a desarrollar su autonomía y favorecer su desarrollo”, explica Raquel González.

Luz bajo control

Entre las múltiples cosas que tendrás que enseñar a tu bebé está la diferencia entre el día y la noche. Que por el día se juega y por la noche se duerme o, como recuerda el doctor Víctor Solo, “es muy importante que el bebé se adapte al ritmo circadiano. En los primeros seis meses de vida tienen ritmo ultradiano (comen y duermen), luego ya tienen que pasar a un ritmo circadiano y hay que ayudarles a cogerlo. Lo primero es con la luz, por el día, y luego con la oscuridad de la noche”.

El sueño es fundamental en el ser humano, pero más en los bebés, puesto que es muy importante para el desarrollo cerebral

Por eso, elegir la mejor iluminación de la habitación es un aspecto fundamental, sobre todo teniendo en cuenta que la melatonina (la hormona que favorece el sueño) se activa con la oscuridad. La recomendación es controlar las luces de manera gradual (los sistemas de iluminación inteligente y regulables son nuestros mejores aliados), pasando desde 75 lúmenes hasta dejar la habitación a oscuras y utilizando una tonalidad fría por la noche cuando el bebé está dormido. También se puede regular la intensidad para tener una luz de acompañamiento por si se despierta, hay que darle de comer o cambiar el pañal. Al contrario, para despertarse se recomienda que la luz sea gradual partiendo de la oscuridad hasta 75 lúmenes, en este caso hacia tonos cálidos. Con este proceso conectamos con el anochecer y el amanecer. “Es muy importante que los bebés se sincronicen con el medio ambiente: por la mañana les dé la luz natural y de noche, la oscuridad. Sobre todo si el bebé vive en ambiente rural es mejor que duerma con persianas subidas”, agrega el doctor Soto.

Las ventanas, por su parte, son la principal fuente de luz natural y nos ayudan a controlar la cantidad de luz y la temperatura del exterior que recibe el bebé. Por ello, hay que tener claro cómo vestirlas. Lo recomendable es usar cortinas o estores de material opaco. Si ponemos cortinas, la cuna no debe estar cerca de la ventana para evitar que el bebé pueda agarrase a ellas. Los estores sin cordones son también una opción muy segura.

Según la experta

“En la mayoría de nuestras cunas, uno de los lados se puede retirar cuando tu hijo comience a entrar y salir solo de la misma, para comenzar a desarrollar su autonomía y favorecer su desarrollo”. Raquel GonzálezResponsable de confort y descanso de IKEA Ibérica

Temperatura perfecta

La temperatura de la habitación del bebé debe mantenerse entre los 18 y 21 grados para favorecer un sueño profundo y reparador. Para conseguirlo lo mejor es usar tejidos en la ropa de cama que favorezcan la termorregulación, como el lyocell, un tejido que permite la transpiración del bebé, a la vez que mantiene su confort térmico. Hasta los 18 meses, los sacos de dormir son una magnifica (y segura) opción porque evitan que al bebé se le quede la cabeza cubierta por el edredón o sábanas y le dificulte respirar. Los materiales naturales, como algodón y lana, son otros de tus grandes aliados ya que eliminan la humedad y mantendrán fresco a tu hijo.

Habitación sin ruido

El ruido altera el sueño, como demuestran diversos estudios científicos. La OMS establece en 30 decibelios el nivel de ruido aceptable en las habitaciones durante la noche. Por eso, usar técnicas de aislamiento acústico puede asegurar un buen descanso a tu bebé. Elementos como las cortinas (mejor si son gruesas) pueden ayudar, actuando como aislante acústico del ruido exterior, al igual que los paneles acústicos.

Mobiliario y decoración

Los colores que transmiten paz, como los neutros o pasteles, son los más recomendables para la habitación del bebé. También es importante que, en la medida de lo posible, la zona de dormir esté alejada de las ventanas. Para crear la habitación perfecta del sueño siempre son preferibles los materiales naturales para los muebles, colchones, textiles y complementos. Las maderas naturales y claras, como el abedul, el pino o el haya, son claras y ligeras y nos conectan con la naturaleza. Para lámparas, la fibra es muy recomendable por la ligereza que aporta a la habitación.

Orden y concierto

Son tantas las actividades que tienen como escenario la habitación del bebé que los padres no pueden permitirse el desorden. Cada espacio tiene que tener su función, desde la organización del armario del bebé, hasta la organización del cambiador o la zona para darle de comer. La clave es tener siempre a mano lo que más se utiliza y dejar en las zonas más altas lo que necesitamos con menos frecuencia. Todo esto evitando que las cosas queden al alcance del bebé.

En definitiva, estos consejos te pueden ayudar para disfrutar y vivir con más tranquilidad uno de los momentos más especiales de la vida como es la llegada de un bebé porque, como dijo el escritor Chesterton, “lo maravilloso de la infancia es que cualquier cosa en ella es una maravilla”.

tu espacio de descanso

El ambiente perfecto para soñar

CRÉDITOS

Coordinación: Prado Campos y Cecilia Marín

Diseño UI y Dirección de Arte: Alessandro Marra

Maquetación: Saúl Fernández | Producción: Delia Blesa

Ilustraciones y animación: Iñaki San Juan y Antonia y Pepa

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